miércoles, 29 de junio de 2011

Mi estreno

Amaneció soleado, tras ultimar compras de última hora. Me acerqué a la casa campo. Estuve empapándome del ambiente que allí había.
Primer sector: dos vueltas a un circuito de 750 m. nadando entre….y entre…mejor no pensarlo. Todos nos tiramos de cabeza, pero debí ser el único que pierde las gafas, me las medio coloco y a nadar. Bueno el agua es molesta rozando los ojos mientras nadas, pero no puedo parar a vaciarlas, esperare a terminar y cuando este sobre la plataforma me las coloco. En esta segunda vuelta no me tiro de cabeza, ahora es otra historia, todo se ve mucho mejor, entre marrón y verde, que color más bonito tiene el agua….ufff!!
Por cierto, no estaba borracho, pero las boyas no paraban de moverse.
Según el Garmin, mi recorrido, evidentemente no llegue a pisar tierra, pero creo que no se aleja demasiado del real. 1500 metros?
Segundo sector: Tras una transición más o menos rápida, adelantando a gente en el pequeño tramo de carrera. Tomábamos la bicicleta. 5 vueltas a un recorrido de 7,5 km. Es lo que peor llevo y lo sé, veré pasar a todo el mundo, y así fue, pero solo en las subidas, en las bajadas, les recuperaba la posición. En la bicicleta sufrí mi mayor error. Solo un bidón de medio litro para todo el recorrido, nada que comer, y sin avituallamientos extra. Algo que después sufriría en la carrera a pie.
Tercer sector: Tras una transición un poco más lenta que la anterior hay que dar 4 vueltas a un circuito de 2,5 km, me pongo a correr, mis piernas están agarrotadas, normal, dentro de lo que esperaba, a pesar de eso, mi ritmo de carrera es de 4:32 el kilometro. Pero duraría poco solo 2 km. Ya que empezaron los calambres en las piernas, en la segunda, tercera y última vuelta, sufrí calambres, a consecuencia de la deshidratación, en la carrera había avituallamiento, pero me costó recuperar líquidos. Quizá mi último kilometro mejor, pero mi ritmo de carrera no era el deseado. Los últimos metros, subidón de fuerza, ya no quedaba nada para terminar y aproveche para aumentar mi ritmo y adelantar a varios corredores.
He de agradecer a mis padres, hermana y cuñado por estar ahí gritándome y animándome. Y especialmente a dos incondicionales un poco locas por aguantar más de 3 horas al sol, entre polvo y viendo como un puñado de locos sufren. Cristina y María José, gracias por el apoyo, por contarme las vueltas del recorrido y chivarme lo que me quedaba. También quiero agradecer a mi familia que aunque no pudieron venir, se que estaba en sus pensamientos. Evidentemente a mi compi Mariví, Ángel por sus recomendaciones, Aitor que aunque me aconsejaste sobre la comida, al final, no pude hacerte caso y lo pague. Y a tod@s por aguantarme los viernes y algunos algún día mas. Sin vosotros no hubiese podido acabar mi primer triatlón. Gracias.

Roberto Crespo

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡¡¡Enhorabuena, Titán!!! No te preocupes, para el siguiente, bocata de chorizo en la transición, al más puro estilo Jabalíman, y ni rastro de deshidratación.
Ya has abierto la lata, así que ahora toca llenarla de buenos y sabrosos triathlones...¡nos vemos en Lanzarote 2012!
Aitor.