En Agosto descansamos la gran mayoría, pero no nos relajamos
del todo, para mantener el nivel de actividad de una manera más o menos activa.
Y muchos probáis a realizar entrenamientos más tempranos que de lo habitual,
buscando las mejores horas para evitar el calor y esto provoca el entrenar en
ayunas, os diremos los pros y contras de este tipo de entrenamientos:
Al entrenar en ayunas, nuestros depósitos de hidratos de
carbono están más bajos y con niveles bajos de glucógeno y azúcar en sangre, de
esta manera nuestro organismo tirará más de grasas como fuente energética. Por
tanto la primera consecuencia es la perdida de esta de nuestro organismo. Pero
la perdida de grasa no conlleva la pérdida de peso. Y lo que realmente ocurre
es que el uso de esas grasas aumenta durante el tiempo que entrenamos, pero disminuirá
ese uso durante el resto del día. Por tanto, si buscamos perder peso,
tendríamos que realizar doble entrenamiento, uno en ayunas y otro con ingesta
de alimentos.
Pero realmente en triatletas buscamos en los entrenamientos
en ayunas perder peso o realmente buscamos acostumbrar al organismo a mejorar
el uso metabólico para ahorrar glucógeno en competiciones de media y larga
distancia. Buscando una eficiencia en ambas vías metabólicas, usando grasas y
usando carbohidratos.
Los entrenamientos en ayunas debemos tenerlos bien
planificados y tener en cuenta estas consideraciones:
- - Intensidades bajas (no más de 40´ y con
experiencia no más de 2 horas)
- - Desaconsejados los entrenamientos intensos o
submáximos
- - Aunque sea en ayunas un café no viene de más o
carbohidratos de asimilación rápida.
- - Es bueno tomar proteínas antes, durante o después
para equilibrar su degradación.
- - Estos es bueno combinarlos con entrenamientos de
alta intensidad con ingesta de carbohidratos.