sábado, 10 de septiembre de 2011

La mejor llegada a meta posible. - ½ IM-Guadalajara, 03/09/11

No podía haber acabado de mejor forma, después de una carrera dura, no estando yo en mi mejor forma (se me fue la prueba a seis horas, lejos de las cinco horas y cuarto en las que me moví en Lisboa, Buitrago y Zarautz, los otros tres retos de este año), después de un mes sin entrenar, con pocas horas de sueño, en una carrera dura (creo que la más dura que he hecho, quitando el ‘infierno’ Astromad), exigente pero muy bonita; después de una natación horrorosa, la peor de mi vida (qué vergüenza, no podía quitarme esa palabra de la cabeza en los primeros kilómetros de bici, sólo quedaron cinco o seis rezagados más detrás de mí cuando salí del agua, si no llevo neopreno me ahogo…), un circuito de bici con cinco ‘puertos’, cortos pero intensos, con constantes toboganes, viento lateral y en contra en las rectas, la carrera a pie para sufrirla, con bajadas y subidas largas (maldita cuesta junto al muro!)…Pero ahí estaban ellos, en el último giro a meta, dentro de las pistas de atletismo, entrando en la recta del último 100, con más pena que gloria, veo a Begoña con Diego en los brazos, 28 días con nosotros, me lo pasa, veo el cielo, empiezo a caminar hacia meta, sólo puedo mirarlo a él, nudo en la garganta, aguantando las lágrimas, oigo a la gente aplaudir, al ‘speaker’ decir que ahí llega el triatleta más joven de los 26 años de historia del triatlón de Guadalajara, cruzo la meta, gracias Begoña por haberme dado ese momento tan bonito, gracias por todos los momentos...Ahí están todos, Begoña, Sergio, Mariví, Ángel, Rober, Josele, Esther, todos mirando a Diego, su primera meta…

Atrás queda en ese momento una temporada irrepetible, llena de retos cumplidos y momentos excepcionales, al lado siempre de la mejor compañía, de la mejor gente, qué grandes sois! Ya sólo queda mirar a Lanzarote, ese es el objetivo, como me dijo Ángel-maestro-Jedi en la última vuelta, cuando le dije que vaya tiempo vergonzoso que estaba haciendo (carrerón como siempre para él, irreductible, y mención especial para Josele, se salió), que visualizase la meta de Lanzarote, ahí es donde hay que mirar. Rober, esto no ha hecho más que empezar, tómatelo como lo que es, un estreno en la media distancia, ni más ni menos…

Comienza la cuenta atrás, en menos de nueve meses, Diego me esperará en la meta del Puerto del Carmen…

Aitor.