martes, 9 de abril de 2013

Todo entrenamiento tiene su recompensa


Todo entrenamiento tiene como recompensa bajar un kilo, que te entren aquellos pantalones que tanto te gustan, bajar tripa, que se te marque con poquito algún abdominal…. Aunque casi siempre la recompensa es sentirte Genial. Tras haber cogido el coche, plantarte en el gimnasio con pocas ganas de hacer algo (unos días te sientes perro sin ánimo y otros máquina) y completada la hora de entrenamiento ya en el vestuario, mientras te duchas, piensas que te siente Bien, estas cansada pero Feliz, tu Recompensa.
Por eso cumplir con los objetivos de entrenamiento semanales te lleva a que en algunos casos se consiga una Recompensa diferente y eso es lo que me ocurrió en la Carrera DKV Bomberos de Madrid, 24 de marzo 2013.

Al principio de temporada, las Girl Runners, junto con Isma (mi marido) y mi hermano David nos marcamos un calendario de carreras. Nos apuntamos a la Carrera de los Bomberos (10km por Madrid, salida Pl. Montera, subiendo por Pº de Castellana girar en Pl. Castilla y volver a bajar por Pº Castellana hasta la meta en Pl. Cibeles).

Hacía unas semanas que en el Club de Corredor, habíamos estado entrenando cuestas con Miguel Ángel, lo que nos venía genial para esta carrera, ya que la mitad del recorrido era subida. A lo largo de la semana todo iba bien, me sentía máquina, pero tenía alguna molestia en la garganta. Pensé que se pasaría solo, pero transcurrían los días, el dolor no se iba y me sentía perro. El sábado por la noche me fui a urgencias “Tienes… faringitis aguda…..al menos 48horas sin hacer deporte…antibióticos….!!!” y en horas la carrera, con antibióticos no iba a rendir lo mismo. No me importó, porque la carrera iba a ser un entrenamiento y con esa idea nos levantamos el domingo y nos plantamos a las 9:30h en la línea de salida.

Pistoletazo de salida, empecé a correr, al ritmo que la garganta me permitía. Hasta el kilómetro 3 no me encontré muy allá, menos mal que David me engancho y me hizo de liebre. Como siempre, me puse objetivos cortos de carrera, chica que avisto, chica que tengo que pasar. Me busqué una y a por ella que fui. Sobre el kilometro 5, me encontré fuerte, la garganta se había adaptado a correr. Pasé a mi primer objetivo, ahora sólo pensaba en que, cuanto más cerca de Pl. Castilla estuviera sin cruzarme con los primeros corredores, significaba que no iba tan mal de tiempo. Me crucé con el primero, en el minuto 21 de carrera y comencé a contar las chicas que bajaban para saber cuántas iban delante de mí. Al ratito la primera, Ana Burgos, Triatleta Olímpica y por detrás David de Zagros Triathlon.
Coroné Pl. Castilla, el resto del recorrido cuesta abajo. Solté el cuerpo, alargué la zancada y a dejarse caer. Y como yo, el resto de corredores que estaban a mi lado, con lo que el ritmo de carrera se aceleró y la carrera se volvió rápida. Todos pensando en llegar a la meta cuanto antes. De nuevo la chica a la que había pasado me adelantó. Así que tenía nuevamente el mismo objetivo. Cuando ya solo faltaban 2 kilómetros para meta, la carrera se hizo pesada. Salió el sol, calor y las fuerzas ya flaqueaban. Mi objetivo se alejaba. Bajé un poco el ritmo, intentando alargar la zancada. Cuando vi el crono en meta, marcaba cuarenta y seis minutos y pico. “Puff!!…esta no ha sido mi carrera. He subido mi tiempo en casi cuatro minutos, respecto a mis últimos diez kilómetros. En fin...”

Tras juntarnos en meta con Girl Runners, Isma y David, nos fuimos a por nuestra Recompensa, un Buen Desayuno. Sin embargo quedaba otra recompensa por llegar. Al ver las clasificaciones de la Carrera, esa noche, nos dimos cuenta que había quedado segunda en mi categoría de Veterana A y puesto 18 de la clasificación absoluta femenina, después de que Ana Burgos, Ganadora Absoluta, me sacara 12 minutos.

Así que siempre todo entrenamiento tiene su recompensa un desayuno, una copa, un kilo menos…

Maria Reigal

2 comentarios:

Unknown dijo...

Muy buena Maria!!
Cuando no te quede sitio donde poner tanto trofeo, a por IKEA!!!

Anónimo dijo...

Jijiji Que gracioso