Estaba animada, pero tenía miedo, no sabía cómo iba a transcurrir la carrera después de iniciar la temporada con mala pata. El mes de octubre prácticamente sin poder hacer nada más que, nadar y estirar, al haberse inflamado la parte superior del cuádriceps, psoas…. de mi pata derecha. Y eso que paré en el mes de agosto con las vacas y tan sólo Isma y yo nos hicimos algunos largos, eso sí, en mar abierto (en Sanxenxo, que no habíamos probado nunca)!!!
Habíamos quedado un montón de gente de Zagros, el tercer equipo de la carrera en número de participantes por debajo de Real Madrid y de Atlético de Madrid. Fede, su padre y Yolanda, nos esperaban en la zona de recogida de chip. Nos empezamos a encontrar todos, Vero y MJ, Rober, Miguel, Javier, Lola, Isra, Miguel Ángel … uff, cuanta gente!! Hay que estirar y calentar un poquito y a los soportales de ECI que nos fuimos, como cada año Isma, mi hermano y yo.
No tenía nada claro, a cuanto hacer el kilometro, ni el tiempo aproximado total que quería hacer. Rober me preguntó antes de salir, y la verdad es que hasta ese momento, no me lo había planteado. Me picó un poco porque MJ quería bajar su tiempo, en la última carrera de diez miles, 54min, a si que decidí unirme a ellos, pero Isma y mi hermano me convencieron para que fuera a mi ritmo.
Cuando nos estábamos colocando en la salida, nos encontramos con Miguel Ángel y Javier. Nos colocamos Javier, Isma, mi hermano David y yo con él, en el globo de 45min, estábamos nerviosos!!!
Y empieza la carrera.
Enseguida Miguel Ángel se fue. Mantuve un ritmo más o menos alto durante los tres primeros kilómetros, Javier, mi hermano e Isma iban detrás. De vez en cuando echaba una miradita para ver cómo iban y comprobar que no me estaba pasando con el ritmo y evitar que acabar fundida al poco tiempo. Pero el globo de 45min se alejaba y me sentía un poco forzada, así que decidí bajar el ritmo. Al poco tiempo aunque llevaba música, oía a la gente hablar muy alto, me llamaba mucho la atención y en la calle Juan Bravo, las voces las tenía pegas, era el globo de 50min con dos liebre!!!. Dos chicos majísimos que no paraban de dar consejos e instrucciones, decidí no separarme de ellos en toda la carrera.
Aunque veía pasar los carteles con la indicación de los kilómetros, no quería mirar el tiempo para no ponerme nerviosa, pero cada dos por tres el resto de corredores se encargaban de recordarnos, que íbamos más rápidos a 4´50´´. Claro, porque como buenas liebre que fueron, nos ayudaron a ganar poco a poco y en los tramos cuesta bajo, hasta 1´10´´que posteriormente íbamos a perder, en el momento que entráramos en el Retiro y sobre todo en la cuesta del Ángel Caído.
Así fue, íbamos más rápido en la cuesta bajo a pesar de que los cuádriceps sufrían, pero soltábamos el cuerpo evitando hacer esfuerzo innecesario que luego necesitaríamos. Entramos en Alfonso XII y empieza la parte dura de la carrera, las liebres nos van indicando que bajemos el ritmo y nos lo tomemos con tranquilidad porque todavía queda tramo de subida, entramos en el Retiro y sus instrucciones son zancadas cortas y no bajar la cadencia y si podéis ir de puntillas mejor. Busqué rápidamente una canción con marcha en el ipod y a seguir instrucciones. Decidí tirar a mi ritmo, un poco más rápido que el de las liebres y tratar de hacer sola los casi últimos tres kilómetros que faltaban hasta la meta, ya que en caso de no poder, me cogerían de nuevo las liebres y terminaría con ellas la carrera. Tras hacer cumbre en la dichosa cuesta del Ángel Caído me encontraba bien y subí un poco el ritmo, me crucé con Isma y con mi hermano, no les sacaba demasiada distancia, lo que me alegró bastante, porque igual, Isma, podría conseguir hacer la carrera en 50min aproximadamente.
Cuando vi el último kilómetro de carrera marcado, decidí subir un poco más el ritmo y entrar entre 48/49 minutos. Así fue, 49´26´´.
Primera carrera de la temporada terminada, sin que la pata me molestara.
Ahora toca volver a bajar mis tiempos, de la temporada pasada.
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